[disponible tras el encuentro]
13/05/2015, 12.15-13.10
Las normas que regulan el comportamiento de las personas, en su más pura dualidad genérica, se escriben en base a una heteronormatividad donde las emociones juegan un papel fundamental; éstas ya no forman parte del orden pre-moderno ni moderno de la industrialización, sino que responden a una relatividad individual, hedonista y material-comercial muy superficial. Jovencitas (TIqqun) que se transforman, son y buscan emociones felices, un futuro del alma encaminado intentar erradicar completamente el sufrimiento, ya sea desde la compra, venta y prosumo de lo sexual (ser cool comprando un vibrador de diseño, subiendo un desnudo pseudo integral a instagram o un vídeo porno casero a youtube), erótico (lo mismo pero sin ser tan explícito) y romántico (sin sexo sólo amor).
Partiendo de los conceptos de jovencita –el ciudadano modelo que nace como respuesta a la amenaza revolucionaria- y de capitalismo caliente (farmacopornográfico) hemos identificado comportamientos cotidianos, comunes y “ordinarios”-en su máxima expresión- que la gente suele y hace en la cibersociedad (redes sociales, espacios de distribución de vídeos, foros, blogs, etc.,), en la sociedad móvil (apps de comunicación e interacción, o de contactos), en la sociedad mass-media (sobre todo televisiva) y en la sociedad real, cómo sentimientos y acciones que se enmarcan en el nuevo orden sexo-romántico: todos podemos ser sadomaso porno star pero a la vez sin salirnos de la normatividad sexo-política. 50 sombras de Grey no es sadomasoquismo, es pseudo sexo de ayuda dual genérico, hombres-mujeres y viceversa no es liberación sexual y promiscuidad, es ver cómo a estas alturas la mujer sigue siendo un objeto y no un sujeto; la ropa súper-sexy porno te la puedes poner pero seguirán viéndote como una “puta” aunque la vendan. Es una forma de super normativizar genéricamente hablando -estereotipos tradicionales- sadomasoquizando y pornificando las conductas de consumo y estilos de vida, eso sí, dulcificados, enfocados a lo comercial a lo funcional, utilitarista y positivo.
“Me desnudo, subo la foto, me ven, me arrepiento porque es íntimo, pero lo he subido a una red…” consumen mi intimidad, consumo la intimidad de los demás. Se ha roto la experiencia de las emociones íntimas o por el contrario esa intimidad se ha vuelto más intimidad al ser pública. Un nuevo orden sexo-romántico que mezcla una idea vana y vaga de libertad sexual con el papel-rol-estereotipo tradicional del sexo-género. Donde el mercado de las emociones vende el amor romántico, la pareja dual, los hijos. Felicidad en píldoras de autoayuda, en formato televisivo, series, novelas, revistas y demás narrativas info-bio-políticas disfrazadas de sexualidades no normativas, ya sea el sado masoquismo, la pornografía, la bricotecnología sexual –Sex shop, tupper sex, tiendas eróticas, etc.,- que están lejos de los supuestos orígenes de esos espacios de lo perverso o abyecto no normativo. «La jovencita ama lo auténtico porque es una mentira”.
Disculpad, me es imposible asistir a este encuentro, me encantaría tener esta ponencia/comunicación, ¿cómo es posible conseguila?
Mil gracias.
Cristina, como te decía en otro comentario los vídeos estarán disponibles en el blog tras las jornadas
Estoy sorprendido de encontrar blogs donde ver informacion tan necesaria como esta. Gracias por facilitar este articulo.
Saludos