La firma, una resistencia cotidiana. Acercamiento sociológico al graffiti

Sesión Café con Pósters (II)
11/05/2017, 11.30-12.15


NEREA GONZÁLEZ CALVO es licenciada en Sociología por la Universidad Pública de Navarra

Presentaré algunos ejercicios de acercamiento sociológico al movimiento del graffiti que vengo realizando desde 2008. Centrados en la relación de lxs escritorxs con el espacio urbano, las imágenes construidas en torno a la ciudad, la visibilización de la existencia de las mujeres escritoras y el papel de la crítica de arte de graffiti como resistencia a la crítica institucional.
I. Graffiti, una resistencia cotidiana
Decía R.Park (1915) que la ciudad no es un producto artificial sino una representación de los estados de ánimo de sus habitantes. De un tiempo a esta parte han predominado discursos sobre modelos de ciudad “asépticas”, “higiénicas”, quizá nos encontremos en punto de inflexión respecto tales ideas ¿pero cómo palpar los estados de ánimo en escenarios urbanos musealizados?
El graffiti puede darnos unas cuantas pistas, presentado como un modo de expresión de resistencia a lo socialmente establecido y crítico ante lo acontecido sigue su lucha interna a través de algo tan cotidiano como la firma. Pervive y se reinventa en una sociedad que mayoritariamente lo rechaza; ejerciendo un férreo control en su contra así como a través de su criminalización y penalización administrativa. Una resistencia inherente a la vida humana, pero que tal y como lo conocemos está ligado a la cultura Hip-hop y comenzó a finales de los 60 del siglo pasado. Inconformismo, lucha contra la homologación social; resistencia a la absorción que permite hacer extensible individualidad y singularidad propia. La búsqueda y conservación de la autonomía personal, en la vorágine de la sociedad urbana, Simmel (1903).
II. Resistencia ante los estereotipos.
El graffiti, es proyectado por los medios de comunicación y la opinión pública como una película en la que participan actores jóvenes que cometen actos vandálicos. Esta es la imagen que mayormente llega a la gente porque el conocimiento directo pasa por ahí y por la normativa legal punitiva que rige la acción de la escritura. Hay un claro desconocimiento del movimiento y sus dinámicas de grupo, exceptuando aquellos casos en los que hay vinculación directa o cercanía al graffiti. Claro que esto es una imagen que se aleja bastante de la realidad. El graffiti es un movimiento sociocultural underground, cuyas opiniones y reflexiones en torno a la sociedad y el espacio público resisten de un modo cotidiano ante enfoques normativos. Y en el graffiti hay mujeres “escritoras”, lo que ocurre es que se invisibiliza su presencia. Es importante, por tanto, romper con esa imagen preconcebida y estereotipada.
III. Crítica de graffiti como resistencia.
Abordar la crítica de arte desde expresiones culturales que forman parte del escenario expositivo más inmediato, la calle. Entendiéndose como una metodología que practique una crítica de resistencia ante lo macro, que permita cuestionar y reformular el propio género.
Bibliografía citada
Park, R.E. (1915): “La ciudad. Sugerencias para la investigación del comportamiento en el medio urbano”, en La ciudad y otros ensayos de ecología urbana. Barcelona, Serbal, 1999.
Simmel, G. (1903): “Las grandes urbes y la vida del espíritu”, en El individuo y la libertad. Ensayos de crítica de la cultura. Barcelona, Península, 1986.