Sesión Contextos de resistencia
10/05/2017, 11.15-11.45
RESUMEN: La comunicación pretende conversar sobre pequeñas micro-resistencias ordinarias y cotidianas frente a la violencias de los dualismos de sexo/género, algunas fallidas otras exitosas ante ordenamientos tozudos y con inercias. En concreto, las que se producen desde un cuerpo reconocido mayoritariamente como “femenino”, pero que reclama socialmente una identidad de género en masculino, para poder vivir desde la ambigüedad sentida como identificación. Para ello, se expondrán, a modo de flashes, situaciones cotidianas donde se refleja esa idea de lo ordinario como campo de batalla: desde cuando se va a mear -cuál es la mejor respuesta ante “este baño es de mujeres”, o lo que significa el pequeño acto de dejar una compresa en un baño de hombres-, hasta la ergonomía menstrual de los calzoncillos; o cómo terciar cuando la dependienta te manda a la sección femenina de ropa o solo te ofrece zapatillas deportivas de chicas, cómo responder al panadero cuando insiste en llamarte por tu nombre anterior o si contárselo o no al portero, cómo responder (o no hacerlo) ante el “hola chicas” del camarero. Pero también, cómo manejar el verano, el aire de cara para que no se te noten los pechos con camisetas finas, qué hacer con el cuerpo en las playas. En contextos académicos, cómo responde la gente cuando sales del armario trans en “ruegos y preguntas” de un Consejo de Departamento; el aprendizaje de hablar en impersonal ante el alumnado; conseguir cambiar tu nombre en el correo y campus virtual o utilizar solo la inicial entre paréntesis para que Aneca te reconozca lo que publicas. O formas de ignorancia activa de los privilegios cuando te dicen: “qué ganas de complicarte la vida”; cuando tienes que repetir una y otra vez el pronombre que quieres y no hay aprendizaje porque “cuesta mucho”, o cuando no se entiende que la identidad se sostiene en el reconocimiento de los otros. En general, mi idea es exponer pequeños actos cotidianos donde pretendo mostrar que el llamado passing o “pasar por” no necesariamente tiene que pasar por la modificación corporal (si no se quiere), otra opción es forzar para que pase por el trabajo cognitivo, emocional e intencional de la persona que mira y re/des-conoce: situarlo en la mirada, en la relación con el otro y en pequeñas batallitas cotidianas.