EMOSIDO ENGAÑADO 2.0: La apropiación de las posibilidades de la tecnología por parte del pensamiento hegemónico de Silicon Valey (título provisional)

Sociología Ordinaria Siete:
Apropiaciones, expropiaciones, reapropiaciones y… vuelta a empezar
Sesión «Si Curro Jiménez levantara la cabeza»

21/05/2019, 12:30-13:15

 


Daniel Rato Martín es… [pendiente de actualización]

RESUMEN: ¿Qué tiene que ver Zapatero en Vistalegre en pleno inicio de la crisis diciendo que hace falta “menos ladrillo y más ordenadores”, con los memes que le pasas a tus colegas por Telegram sobre la vuelta de Pablo Iglesias, el haberte pillado los Juegos Reunidos Feministas por Amazon antes que acercarte a Traficantes y las declaraciones de Rosell (presidente de la patronal) afirmando que “el trabajo fijo y seguro es un concepto del siglo XIX”? Pues, en principio, muy poco. Pero de eso va la cosa: de tratar de demostrar cómo el éxito del pensamiento actual respecto a las tecnologías consiste en invisibilizar sus operaciones.

De un tiempo a esta parte parece existir un consenso general a la hora de sostener que los sistemas de acción racional con respecto a fines han colonizado el marco institucional (Marcuse, Habermas) gracias a las nuevas tecnologías (con especial hincapié en las TIC), entrando en una suerte de capitalismo big tech en el que la producción de explicaciones solo puede ser válida si se hace a través del prisma de internet. Todo esto se podría resumir de manera más ordinaria diciendo que internet es hoy lo que era para Homer Simpson el alcohol: causa y a la vez solución de todos los problemas de la vida.

Si bien la historia de la contracultura informática europea destacó por tener un fuerte componente político y comunal (heredado de tradiciones emancipatorias del siglo XIX) que cristalizó en los partidos piratas de países como Alemania o Islandia, parece que este relato ha sucumbido al propio de Silicon Valley, vertebrado por ese inesperado y contradictorio encuentro entre el pensamiento liberal y ultraindividualista de Ayn Rand y el anhelo de comunidad y cooperación inspirado en las reservas indias americanas de Stewart Brand. La apropiación y vaciado de la cultura hacker ayudará a comprender la ausencia de programas políticos de izquierdas eficaces e ilusionantes en este ámbito, donde las propuestas de Podemos son indistinguibles de las del PP, más allá de la implementación de software libre en la Administración.

Desde las granjas de clicks en China a los trabajadores de Amazon en San Fernando de Henares (que hacen plantearse lo de la ‘sociedad postindustrial’), las smart cities, la transformación digital de las universidades o las dinámicas de explotación del ocio y tiempo libre por parte de Facebook (Ángel Lara), hacen ver que, aunque el poder se ejerza de manera diferente en la actualidad, no quiere decir que estemos más emancipados.