Adiós a la estética: de los deseos de Seiu Ito a Gossypium

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El trabajo de Seiu Ito es considerado por los expertos como clave para la conformación del actual BDSM (siglas que resumen el complejo y desfigurado conjunto de prácticas de Bondage, Dominación, Sado y Masoquismo). Remontándonos a los aportes de Seiu Ito, tenemos que reivindicar su papel en el kinbaku moderno, que integra en sí una compleja relación entre Poder-Dolor-Placer-Arte . Si bien la palabra shibari hace alusión al acto de atar, la palabra kinbaku se refiere al arte de la atadura y bajo la forma bi-kinbaku se traduce como “esclavitud hermosa” o desde otra traducción “estrecha vinculación”, es decir, un lazo indisoluble entre el creador y su creación. Ambas traducciones nos sitúan en dos planos divergentes: en la dimensión artística o por otro lado en la dimensión estética, ambas don distintos estadios de deseo, puesto que “la dimensión artística posee su objeto sin conocerlo”, y “la dimensión estética conoce su objeto sin poseerlo”. El propio Kant distinguía entre dimensión estética y dimensión artística, y afirmaba que sólo en la estética se encuentra la “negación de lo social”. No sólo la estética no está supeditada por lo social, sino que además la estética permite la reconciliación de lo inteligible «la tarea de la reflexión estética es identificar y comprender los objetos artísticos y la recepción artística, y no proponer un ideal estético o criterios de juicio –juicios del gusto-» . Pero esta reflexión estética, debe de tener unos límites, en caso contrario es cuando llegamos al Adiós de la estética. Ranciére señala como la estética todavía no ha recuperado una función social digamos digna, pues de la “negación de lo social”, tendríamos que llegar a adentrarnos en el sueño de la emancipación social. ¿Es esto posible? Nuestra respuesta es afirmativa, y como hilo argumentativo del alcance real de esa meta de emancipación social, haremos una visión histórica-pragmática de la estética del Shibari para visibilizar esos olvidados caminos del deseo.